Proveniente del pez esturión, el caviar son las huevas del mismo, especie que consta de unas veinticinco variedades y los cuales viven mayoritariamente en mares como el Caspio, ríos y lagos de Europa del este y Asia central aunque también se pueden encontrar en el mar Mediterráneo y a lo largo de las costas europeas hasta Noruega.
Muy apreciado tanto por su carne deliciosa y magra, son sus huevas las que resultan ser más apreciadas.
Las huevas se salan y prensan para comercializarlas en coloridas latas de acuerdo a la clase que se ofrezca, siendo que las de tapa azul resultan ser las de beluga, el más apreciado de todos por ser bastante grandes, aunque también puede degustar las de tapa verde con pequeñas huevas de ossetra con sabor a nuez y las de tapa amarilla que contienen las huevas de sevruga, más pequeñas y de color gris obscuro.
Para suavizar su sabor, el caviar se come acompañado de pan tostado, untado con mantequilla y rociado con jugo de limón, tomando blinis o champagne.
El caviar: refinamiento, riqueza y prestigio social por excelencia
Su consumo fue difundido por la nobleza de Persia y Rusia y acogido a principios del siglo XX en Europa como señal de distinción entre las clases altas sobre todo en la vida parisina.
El exilio al que se vio sometida la aristocracia rusa, aumentó el hábito de comer caviar imponiéndose como una moda entre los franceses ricos.
Si bien es cierto, los hermanos Petrossian lo dieron a conocer en la Exposición Universal de París en 1925, fue años después cuando Charles Ritz lo introdujo en las cartas de la cadena de sus lujosos hoteles.
En Costa Rica lo puede degustar en diversos restaurantes, le recomendamos los siguientes que según los clientes en TripAdvisor resultan ser de lo mejor:
- La mesa de Monique y André
comida francesa, Liberia, detrás del Hotel El Sitio - Marisquería Corcovado
teléfono 2666-5081