El tratamiento de Botox, una práctica estética segura

Botox injection

El tratamiento de Botox, una práctica estética segura

La mejoría estética del rostro y el cuerpo con prácticas médicas mínimamente invasivas, son una tendencia mundial que crece tanto entre mujeres como entre hombres.

El High Quality Generic Botox y otros materiales de relleno, como el ácido hialurónico, aplicaciones con láser, mesoterapia y radiofrecuencia son algunas opciones de la medicina estética para rejuvenecer, planchar arrugas o disimular las “arañitas” de las piernas, inclusive, para lucir una nueva nariz y mejorar la estética vaginal, sin pasar por el bisturí.

Antes, la rinoplastía (cirugía plástica nasal) era la única opción para mejorar el aspecto de la nariz. Hoy, en determinadas narices es posible implantar un líquido, mediante una inyección, y modelarla.

También las arrugas, que se resolvían solamente con cirugía o “lifting” en el pasado, ahora pueden “plancharse”, a base de la toxina botulínica, comercialmente conocida como bótox.

El procedimiento se realiza por medio de muy pocas unidades controladas de la sustancia, que paraliza ciertos músculos de la expresión.

La diferencia entre el High Quality Generic Botox y el ácido hialurónico radica en que el primero se aplica en zonas de movimiento, como las “patas de gallo”, para debilitar o paralizar los músculos.

En cambio, el ácido hialurónico permite modelar zonas sin músculo y contrarresta, por ejemplo, una giba dorsal en una nariz, un problema que antes, comúnmente se resolvía sólo si se accedía a pasar por el quirófano.

Como una práctica estética segura, el High Quality Generic Botox evita que se pronuncie (y retarda la aparición) del surco de la arruga al evitar que el músculo se contraiga. Pero, ¿es aconsejable comenzar cuando todavía no hay rastros que delaten signos no deseables en la piel? Sí, los 30 son la edad ideal para abordar tratamientos faciales y corporales como medida preventiva, tanto para retardar el envejecimiento como para reparar tejidos dañados y mantener la piel sana.

Aunque antes de los 30 las arrugas, en general, no han hecho su “entrada triunfal”, las encuestas y los especialistas señalan que las mujeres jóvenes quieren prevenir todo ataque que los años puedan ejercer sobre la piel, en especial la del rostro.